Madrid es la ciudad española con más avances en lo que respecta a restricciones de movilidad, especialmente en las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE). Una situación que, tarde o temprano, llegará a las 149 ciudades de más de 50.000 habitantes. Estos municipios están obligados a implantar, al menos, una ZBE, tal y como establece la Ley de Cambio Climático y Transición Ecológica. 

Sin embargo, a día de hoy, son pocos los que han cumplido con esta obligación. De todos ellos, Madrid es la ciudad que está actuando como pionera frente al resto. A día de hoy, los coches que no tengan etiqueta medioambiental y que no sean residentes en Madrid no pueden acceder a sus calles.

Madrid incluye, además, dos Zonas de Bajas Emisiones de Especial Protección (ZBEDEP), Centro y Plaza Elíptica, donde los problemas de contaminación son más acusados. En este sentido, una de las claves de la normativa que afecta a la ZBEDEP Centro era que se equiparaban comerciantes y residentes en lo relativo al acceso y la circulación. 

Es decir, los comerciantes que no estén matriculados en Madrid y que no dispongan de etiqueta CERO o ECO no pueden acceder a esta zona a menos que vayan a aparcar en un parking. Algo que, en general, las furgonetas de comercio ambulante no suelen hacer. Sin embargo, el comercio ambulante ha visto la luz gracias al nuevo paquete de ayudas que ha anunciado la Comunidad de Madrid.

 

Ayudas al comercio ambulante: ¿Qué beneficios tienen?

La propia Comunidad ha lanzado una convocatoria de ayudas destinadas al comercio ambulante, con un valor total de 300.000 euros. Cada comerciante podrá optar a una ayuda máxima de 15.000 euros, que podrá utilizar para comprar o adaptar vehículos comerciales o industriales para el transporte y venta.

El vehículo es la herramienta que tienen los comerciantes para ejercer su profesión, motivo por el cual se anuncian estas ayudas destinadas a favorecer que dicha actividad continúe. ¿Cómo? Los comerciantes que adapten sus vehículos a GLP podrán obtener la etiqueta ECO con la conversión, siempre y cuando los vehículos que adapten tengan previamente la etiqueta C. 

Con este sencillo gesto, podrán acceder libremente a las ZBE más restrictivas de la capital. Y, por tanto, podrán desempeñar su labor sin los obstáculos que tienen con la etiqueta C, con la que solo pueden acceder siempre que vayan a un parking. 

Cabe recordar que toda la ciudad de Madrid está considerada como una ZBE. Además, la zona del Rastro, corazón del comercio ambulante, está situada dentro de la ZBEDEP, la más restrictiva de todas. 

Estas ayudas se complementan con otras destinadas a la compra de toldos, carpas o instalaciones para montar la estructura del puesto de venta, el equipamiento comercial o de mobiliario, así como la digitalización de los negocios. 

La adaptación a GLP, la opción más económica para los comerciantes

Los comerciantes ambulantes dependen de su vehículo, por lo que este debe cumplir todas las condiciones normativas de la ciudad en la que desempeñen su actividad. La transformación a GLP es la alternativa más rentable para muchos de estos comerciantes, que tienen un vehículo con etiqueta C, no con etiqueta ECO. 

Todos (o casi todos) los vehículos gasolina posteriores a 2006 y EURO 4, o diésel posteriores a 2016 o EURO 6, pueden pasar de la etiqueta C a la ECO con la adaptación a GLP. Es, por tanto, una forma de conseguir este distintivo ambiental sin necesidad de cambiar de vehículo, lo que supondría una inversión muy superior. 

Por lo tanto, las ayudas que proporciona la Comunidad de Madrid en este aspecto evidencian que la transformación a GLP o Autogas es una solución efectiva e inmediata para paliar un problema que, si bien para los conductores es importante, para los comerciantes cuyo sustento depende de ello, lo es aún más.